viernes, 25 de junio de 2010

El mundial... estamos en la cancha!!

Con el mundial no basta. Podemos sentir que nos alegra, nos llena de un grado de optimismo que sólo es perdurable si obtenemos un buen resultado durante y trás los 90 minutos de protagonismo, en tanto estamos en la cancha.

Todos somos protagonistas. Los veintidos jugadores y cada uno de nosotros frente al receptor de imágenes.

Pero por otro lado, la vida de cada uno sigue andando. Hay quienes tienen empresas grandes y quienes tienen empresas pequeñas. Hay quienes tienen pequeños negocios de barrio y quienes tienen grandes supermercados en el barrio. Hay quienes tienen grandes trabajos muy bien pagos, y hay quienes tienen trabajos pequeños muy mal pagos...Así en tiempos de crisis económica, nuestros pensamientos tienden a estar inquietos, la agitación, la incertidumbre y la espera por nuevos y buenos resultados hace que la mente no pare, no pueda disfrutar la vida o el trayecto que hacemos viviendo.- ¡ Estamos en la cancha!

Diariamente vemos mucha irritabilidad en todos los planos. Demasiada inseguridad. Y se me ocurre pensar...¿ Cómo ser creativo en un mundo tan convulsionado que nos rodea?

Así puedo decirme a mi mismo, y tal vez a ti también te sirva: ¡ Multipliquemos la satisfacción de estar jugando!

Observemos que el Mundial es una fantasía. Y observemos también a nuestra vida como a una fantasía, como un juego, y donde todo fluctúa en forma constante, y pueda muchas veces desanimarnos... Ahí pongamos fantasía, pongamos creatividad.

Al fin y al cabo, no puede existir preocupación si nuestro pensamiento creativo es utilizado en forma determinante, y enfocados, - "que la vida es un juego maravilloso, que el hecho de haber nacido nos puede hacer sentir gratitud y amor a Dios"

Y que nuestro juego, nuestra vida merece ser cargada de optimismo constante, aún en las dificultades, para obtener buenos resultados. Y a la fantasía y a la creatividad, podemos disfrutarla desde un pensamiento ordenado y libre de estres, porque somos los propios generadores desde nuestra propia realidad, así podemos ver que el mundial no basta, que la vida de cada uno de nosotros, es más que un mundial y merecemos vivir nuestra realidad, con mente positiva y creativa, porque estamos en la cancha.